Análisis de Reus 2: El Arte de Ser Dios

Reus 2

El Reus original, lanzado en 2013, fue un aclamado simulador de ser Dios combinado con elementos de roguelike. Después de más de una década, Abbey Games ha revivido la saga con Reus 2. Esta secuela resulta llamativa desde el inicio, por su diseño artístico vibrante, su jugabilidad divertida pero accesible, y por la cantidad de desbloqueos disponibles.

Después de varias horas de juego y de otras tantas partidas, paso a contaros mi experiencia y opinión sobre el juego, que ya os digo que es positiva, aunque con algún pero.

La jugabilidad de Reus 2

En Reus 2, asumimos el papel de creadores del universo, gestionando la formación de planetas, cada uno representando una nueva partida. En cada una «usamos» a unos gigantes como «vasallos», que se encargan de realizar la terraformación a nuestra voluntad. Comenzamos con los Gigantes del Bosque, del Océano y de la Piedra, pero a medida que avanzamos y subimos de nivel, podemos desbloquear otros tipos. Cada uno aporta algo diferente, como comida, oro, ciencia y más.

Al final, los Gigantes son la clave del juego. Estos seres no solo crean biomas, sino que también colocan plantas, animales y minerales esenciales para el desarrollo y el crecimiento de los asentamientos. Al inicio, solo tenemos acceso a unas pocas cosas de cada tipo, pero podemos desbloquear más mediante el progreso en el juego y completando los objetivos de los asentamientos. Hay una variedad de desbloqueos considerable.

Una característica a destacar de Reus 2 es la progresión a través de las eras. Las primeras partidas solo podemos jugar en una era, pero poco a poco iremos desbloqueando hasta un total de tres. Esto aumenta bastante el tiempo de juego en cada partida y ofrece más oportunidades para desarrollar y optimizar los planetas, lo cual es crucial para alcanzar los objetivos más avanzados. Cada partida puede desarrollarse entre una y tres eras, siempre dependiendo de nuestro nivel. Decir que hay variantes de las eras, desde la era de la calma, donde precisamente no hay variaciones, hasta la peste negra o la era de hierro.

Para progresar más rápido, los asentamientos irán proponiendo avances de tecnología y cada uno aportará algo diferente al asentamiento. Por ejemplo, la ganadería aumenta la comida mientras que la minería el da más oro. A parte están los objetivos que he mencionado antes, que tienen varios niveles de dificultad, hay algunos bastante complicados y a veces tendremos que elegir cual hacer y cual no.

Apartado audiovisual

El mundo, nunca mejor dicho, del juego, se presenta como un planeta completo y está enteramente nuestra disposición, al inicio como un yermo de ceniza. A medida que terraformamos, vemos biomas muy bonitos como la sabana, la selva, el desierto y muchos más. Los gráficos en si son muy bonitos y si hacemos zoom podemos ver bastante detalle de cada aldeano y de cada asentamiento y bioma en general. La música es relajante y combina muy bien con el arte del juego. No hay voces, que no pasa nada, pero la parte negativa es la falta traducción, el juego está íntegramente en inglés.

En definitiva, Reus 2 es…

Reus 2 es un buen roguelike de simulación divina que ofrece una jugabilidad divertida con un encantador estilo artístico. Las horas se pasan volando, pierdes la noción del tiempo a través de tus propias creaciones planetarias. Aunque podría ser interesante tener más Gigantes, los que están disponibles son bastante variados y verlos moverse al fondo de nuestros mundos es casi como ver a dioses. Es un juego bonito y divertido, no se puede pedir más. Bueno si, una traducción al español.

Si te gustan los juegos de gestión de ciudades, los roguelikes o los simuladores de ser Dios, Reus 2 es una experiencia imprescindible. Sin duda, un juego a tener muy en cuenta.

Reus 2

8

8.0/10

Pro.

  • Muy adictivo
  • Los gigantes
  • Las diferentes Eras

Contra.

  • No está en español

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